Energías de Portugal (EdP) aplazará hasta final de año su decisión de fusionarse con Gas Natural y crear un gran grupo energético para crecer en el mercado ibérico de la energía. Así lo ha manifestado el presidente de la eléctrica lusa, Antonio Mexía, quien ha señalado que «dada la indefinición del mapa eléctrico en España, no es aconsejable adoptar ninguna decisión sobre cualquier posible alianza». Como adelantó ayer EL COMERCIO, EdP ha mantenido reuniones exploratorias con Gas Natural para constituir un gran grupo -al que se sumaría una tercera empresa europea- para ganar peso en el mercado eléctrico español y asegurarse, así, un importante suministrador de gas para los ciclos combinados.
Ahora bien, su crecimiento no se limitaría únicamente a la Península Ibérica. Según recordó ayer el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, si EdP firma una alianza con la compañía gasista, podría ampliar su negocio a Estados Unidos, Brasil y China. Galán lo sabe bien porque, hace años, Iberdrola y EdP elaboraron un plan de expansión para entrar en estos tres países que, finalmente, no fructificó.
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