Si alguna vez existió desde luego que atrás quedó la bonanza energética de la Unión Europea. Los países del club comunitario no son sólo deficitarios de energía, sino que su abastecimiento se ve amenazado por algunas de las tensiones internacionales -la de Irán, suministrador de gas a los Veinticinco, es sólo un ejemplo-. Ante tal panorama, la Presidencia finlandesa ha decidido coger al toro por los cuernos y abordar la cuestión con los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión, que mañana acudirán, junto con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barro-so, a la Cumbre informal de Lathi. Será pues en esta ciudad finlandesa donde los líderes comunitarios examinarán su política energética exterior teniendo muy presente hasta qué punto son dependientes de terceros países para poner fin a esta problemática, cuya solución pasa, según la Presidencia de turno de la UE, por "una respuesta comunitaria y no nacional".
En este sentido, los líderes comunitarios revisarán la propuesta efectuada por la Comisión Europea el pasado mes de marzo, cuando con la publicación de su Libro Verde apostó por "encontrar el equilibrio entre desarrollo sostenible, competitividad y seguridad en el aprovisionamiento energético". Ahora bien, desde aquel mes primaveral, la UE ha sabido identificar seis áreas en las que hay que actuar para, según Finlandia, mejorar la fotografía energética actual, tales como el mercado interior de la electricidad y del gas; la seguridad en el aprovisionamiento en el mercado interior de la energía, teniendo en cuenta el principio de solidaridad entre Estados miembros; la lucha contra el cambio energético; un paquete energético más durable, eficaz y diversificado; una política energética exterior común; y un plan para las tecnologías energéticas estratégicas. Los debates al respecto encontrarán su colofón en un encuentro que los jefes de Estado y de Gobierno de la UE mantendrán con el presidente ruso, Vladímir Putin, invitado al encuentro, y cuya asistencia ya ha sido confirmada, según fuentes comunitarias. En la cena que unirá a los líderes de ambos bandos, ruso y comunitarios tendrán la ocasión de examinar el partenariado estratégico que poseen, en el que queda incluido un apartado energético. Según fuentes diplomáticas, el encuentro con el líder máximo de la Federación Rusa servirá también de preparación para la Cumbre UE-Rusia que se celebrará, si se cumplen las previsiones, el próximo 24 de noviembre en Siberia.
Además, las 25 delegaciones también podrán dejar claros sus "pros" y sus "contras" con respecto a la energía nuclear, después de que la Presidencia finlandesa haya decidido abrir la caja de pandora y no mantener por más tiempo el silencio sepulcral que gira entorno a este asunto. Y sobre todo ahora que los ministros de Asuntos Exteriores se han mostrado a favor de que la ONU imponga sanciones a Irán, por su programa de enriquecimiento de uranio, y que Corea del Norte, en un desafío a la comunidad internacional, haya hecho su primer y desacreditado ensayo nuclear.
Innovación y desarrollo
En otro orden de asuntos, los Veinticinco también abordarán la situación de la innovación en la UE, piedra angular de la competitividad comunitaria. La idea de la Presidencia es que los jefes de Estado y de Gobierno focalicen sus es-fuerzos en poner en marcha proyectos donde la cooperación a escala europea sea susceptible de crear un entorno propicio a la innovación, favoreciendo su explotación de modo eficaz.
Y es que la agenda de Lahti pretende prender la mecha a la innovación para encender el fuego del crecimiento y el empleo y hacer de la UE, como se acordó en Lisboa, la economía más dinámica del mundo asegurando la calidad de vida y la prosperidad de las generaciones comunitarias venideras.
Tanto los debates energéticos como los relativos a la innovación estarán nutridos del análisis que los Veinticinco, junto con Rumanía y Bulgaria, harán del Instituto Europeo de la Tecnología (IET), cuya propuesta de creación ha sido pre-sentada hoy mismo por la Comisión Europea, y cuyo objetivo será promover la triple vertiente que caracteriza a las políticas del conocimiento: innovación, educación e investigación.
La petición de España
Finalmente, la Cumbre del viernes servirá sin duda para que cada delegación realice sus peticiones. La española, representada por el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, solicitará más interés en el desarrollo de África como elemento clave para frenar la inmigración ilegal.
De hecho, el presidente del Gobierno español abrirá la discusión sobre inmigración en Lahti, a petición de la Presidencia finlandesa, y en nombre de los ocho países de Europa, que, por ser frontera sur, se ven más afectados por la llegada de irregulares -España, Italia, Chipre, Eslovaquia, Grecia, Portugal, Francia y Malta-.
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