Mañana miércoles el Ejecutivo comunitario presenta también las conclusiones de otro gran estudio, el dirigido por la comisaria Neelie Kroes sobre competencia en el sector energético de la Unión Europea. Según ha podido saber este periódico, la conclusión del documento es clara, ni en Francia ni en Alemania existe el grado de competencia deseado. Los dos gigantes, el germánico E.ON y el galo EdF, tienen un tamaño y una integración de actividades (generación, transporte y distribución) tal, que no dejan hueco real para la competitividad.
Para intentar corregir esta situación, la comisaria de Competencia propone una serie de medidas que, sin duda, no serán bien aceptadas ni en Berlín ni en París, cuyos gobiernos han hecho saber a Bruselas en más de una ocasión que sus grandes grupos energéticos son «intocables».
Entre las propuestas de la comisaria se incluye la separación del negocio de transporte de la actividad de distribución. La integración vertical es muy ventajosa para las compañías, ya que el transporte de energía aporta «caja» y poder de mercado. En España, esta actividad la realiza el gestor del sistema, no las compañías, pero no sucede así ni en Francia ni en Alemania.
Además, Kroes defenderá la necesidad de imponer cuantiosas multas a aquellas compañías que realicen prácticas de mercado irregulares o colisorias. El importe de las mismas podría llegar a un 10% de la facturación del grupo y tanto EdF como E.ON están en el punto de mira de Kroes.
LaRazon
Para intentar corregir esta situación, la comisaria de Competencia propone una serie de medidas que, sin duda, no serán bien aceptadas ni en Berlín ni en París, cuyos gobiernos han hecho saber a Bruselas en más de una ocasión que sus grandes grupos energéticos son «intocables».
Entre las propuestas de la comisaria se incluye la separación del negocio de transporte de la actividad de distribución. La integración vertical es muy ventajosa para las compañías, ya que el transporte de energía aporta «caja» y poder de mercado. En España, esta actividad la realiza el gestor del sistema, no las compañías, pero no sucede así ni en Francia ni en Alemania.
Además, Kroes defenderá la necesidad de imponer cuantiosas multas a aquellas compañías que realicen prácticas de mercado irregulares o colisorias. El importe de las mismas podría llegar a un 10% de la facturación del grupo y tanto EdF como E.ON están en el punto de mira de Kroes.
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