El monopolio energético ruso Gazprom continúa hoy su política de diversificación de las exportaciones del combustible azul con el proyecto denominado Gasoducto Sureuropeo, cuyo costo se estima en cinco mil millones de de euros.
La construcción de esta tubería que unirá a Rusia con el sudeste de Europa vía Turquía y rodeará el territorio de Ucrania demorará no menos de cinco años.
El propósito es tender este ramal transportador del hidrocarburo por Hungría, Serbia, Bulgaria y Croacia, con un papel fundamental para el territorio húngaro, de acuerdo con su ubicación geográfica, comentó la Voz de Rusia.
Por el momento, Gazprom trabaja en la creación de una empresa que asuma la realización de la obra, y en ese sentido ya firmó un convenio con MOL Group, mayor compañía húngara de petróleo y gas.
La entrada de consorcios rusos al mercado europeo mediante la participación en proyectos conjuntos en el extranjero tienen ingentes perspectivas, destacó el académico Anatoly Dimitriyevski, director del Instituto de Petróleo y Gas de Rusia.
Gazprom lo hace con acierto y en el futuro deben establecerse contactos similares de productores rusos independientes, añadió.
Dimitriyevski consideró que el incremento de la producción de gas licuado aumentará las posibilidades de Moscú de exportar ese combustible no solo a Europa,sino a la región de Asia-Pacífico, América del Norte y del Sur.
Los países europeos reciben gas ruso desde hace más de 30 años y de petróleo desde hace más de 40, mientras el número de clientes crece continuamente, subrayó el experto.
Los gestores del Gasoducto Sureuropeo aspiran a conquistar el suministro de esa materia prima a otros mercados de Europa Central y Meridional como los Balcanes, Austria e Italia.
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