La liquidez que ostenta la petrolera rusa podría derivar en un aporte de capital de u$s3.500 millones. Hay intereses políticos coincidentes en la operación
Los españoles de La Caixa, que en forma directa o indirecta por intermedio de Repinvés poseen 17,6% del capital social de Repsol YPF, están alentando que el gigante petrolero ruso Gazprom se haga con el control de hasta 10% de las acciones de esa corporación hispanoargentina.
La operación podría tener una contrapartida por la parte rusa por el lado del upstream y el objetivo central de la estrategia buscada por Repsol YPF apuntaría a desalentar una eventual oferta hostil por parte de otra petrolera.
El hipotético ingreso de Gazprom no debería ser visto como algo inusual, porque la petrolera estatal mexicana Pemex tiene la propiedad de 4,8% del capital social de Repsol YPF desde hace muchos años.
Además del competitivo y complicado escenario de sobrevivencia que enfrenta tanto Repsol YPF, como otras energéticas como Endesa o Gas Natural dentro del panorama de la Unión Europea, debe tenerse en cuenta que para la corporación hispanoargentina siempre resultó crucial acotar la excesiva dependencia de negocios con base en la Argentina.
En el país Repsol YPF obtiene, por medio de su controlada YPF S.A., una producción equivalente a casi 900.000 barriles diarios (BOE) entre crudo y gas frente a un total de 1.050.000 BOE que produce básicamente en trece diferentes estados de América latina, África del Norte, Dubai e Irán dónde mantiene operaciones de exploración y producción.
Otro de los objetivos buscaría entusiasmar a los rusos de Gazprom en afrontar los desafíos exploratorios que plantea la búsqueda de hidrocarburos en el Mar Argentino, dónde hasta ahora sólo cuenta con el acompañamiento de Petrobras.
Como atractivos Repsol YPF ofrece un target de utilidades anuales superiores a 3.500 millones de euros y un reducido endeudamiento que apenas llega a 5.000 millones de euros.
Pero sus complicaciones estriban en que sus operaciones de producción tienen eje en países de complicada existencia económica como Bolivia o Ecuador o una Argentina que todavía lucha empeñosamente por remontar una de las crisis más fenomenales de su historia.
La Federación Rusa cuenta entre sus principales petroleras a Gazprom y Lukoil. Con estos gigantes logró recuperar la primacía como primer productor mundial de hidrocarburos con casi 550 millones de metros cúbicos anuales de crudo y 540.000 millones de metros cúbicos de gas, Repsol YPF apuntaría a sumar socios y capitales en la tarea del descubrimiento de nuevas reservas.
Cabe destacar que los guarismos productivos de todo el conjunto de la industria petrolera representan, respectivamente, más de 13 y 11 veces el total del crudo y del gas extraído cada año en los yacimientos nacionales.
Otro aspecto que no debe perderse de vista concierne a la necesidad que tiene Repsol YPF de desandar el retroceso con el cual tuvo que convivir la petrolera que conduce desde noviembre del 2004 el catalán Antonio Brufau Niubó.
En efecto, a fines de enero del 2006 Repsol YPF se vio forzada a recortar en 1.250 millones de BOE sus reservas certificadas, fundamentalmente en Bolivia pero también en la Argentina y Venezuela, además de haber visto caer en casi 2,5% los rindes de sus yacimientos.
Importancia
Con una España que obtiene casi la tercera parte de su renta anual en los diferentes negocios energéticos y de servicios públicos que encaró desde hace 15 años en América Latina, los capitales peninsulares se han demostrado desafiantes a la hora de proyectar su futuro.
Los únicos retrocesos de la aventura americana tuvieron epicentro en empresas de la aviación comercial como Viasa, Dominicana de Aviación o Aerolíneas Argentinas, que fue la única que logró sobrevivir.
Otra de las vías que reportaría a Repsol YPF mayores recursos tendrá origen en la futura apertura del capital social de YPF, en la que hasta ahora retiene bajo su propiedad más de 98,2% de sus acciones.
Con una YPF que posee tres grandes refinerías y más de 1.700 estaciones de servicio, además de otros negocios como Mega, Prófertil, Pluspetrol Energy (45%), Refinor (51%) o Central Dock Sud, lo único que no puede dejar de hacer es invertir.
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