El ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, señaló ayer que "nosotros lo que queremos es ampliarlo", al referirse al Convenio Integral de Cooperación entre Venezuela y Cuba que ha sido criticado por los cuantiosos montos que involucra y por la poca contraloría con que cuenta.
En declaraciones al canal del Estado, el también presidente de Pdvsa explicó que el Gobierno tiene la "responsabilidad" de llevar el convenio a áreas como agricultura, ciencia, construcción, intercambio de tecnología, instalación conjunta de fábricas y conformación de empresas mixtas.
"Bueno, es el ALBA (Alternativa Bolivariana de las Américas). Nosotros hemos ido avanzando con Cuba, pero se han venido incorporando otros países a un esquema de intercambio que es novedoso, que es extraordinario porque nos permite liberarnos de mecanismos que existen a nivel de intercambio comercial injustos", aseguró.
Desestimó el rechazo al convenio que expresaron esta semana los ex directores de Pdvsa Humberto Calderón y José Toro Hardy, quienes afirmaron, documentos en mano, que Cuba hizo dos peticiones de fondos adicionales que suman 339 millones de dólares, a pesar de que el envío de petróleo a la isla supera los 2.200 millones de dólares en lo que va de año a un ritmo de casi 100 mil barriles diarios.
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