UE: Ángela Merkel declara que la OPA de E.On sobre Endesa "va por buen camino"

Ángela Merkel, primera ministra alemana, ha pronunciado unas palabras ante los periodistas que muestran que los intentos del Gobierno español por paralizar la OPA lanzada por E.On sobre Endesa pueden resultar infructuosos. Tras haberse entrevistado la pasada noche con Rodríguez Zapatero, Merkel ha comparecido ante la prensa para recordar que “estamos en el mercado común” y que “pese a que aún hay problemas por resolver, la OPA va por buen camino”.

El enfrentamiento entre ambos gobiernos por este asunto surgió desde el momento en que la eléctrica germana dio a conocer su interés por Endesa. Pero se ha hecho más patente desde que el Gobierno decidiera imponer a la alemana, vía la Comisión Nacional de la Energía (CNE), unas duras condiciones a su oferta por la española. El pasado primero de agosto, la eléctrica alemana E.On anunció que recurriría las condiciones impuestas por la Comisión Nacional de la Energía a su oferta pública por el capital de Endesa. Entre los mensajes lanzados por la compañía en su comunicado oficial, E.On dejó ver que con esta decisión, Rodríguez Zapatero había incumplido la promesa de juego limpio que le había hecho a la canciller alemana Ángela Merkel.

El mismo día en que E.On reveló sus intenciones de sumar a Endesa entre sus activos, el Ejecutivo de Zapatero declaró que prefería empresas españolas, en una clara indicación de cuál sería si actitud hacia la alemana. Más tarde Rodríguez Zapatero se entrevistó con el presidente de E.On, Wulf H. Bernotat, y le dejó claras sus intenciones. El diario El País llegó a advertir a la empresa que el Gobierno “les puede causar mucho daño”.

El Gobierno, viendo que la oferta de E.On era notablemente mejor que la de Gas Natural, que había apoyado desde el comienzo, tomó un curso distinto. Anunció la introducción de un cambio legislativo que daría a la CNE el poder de condicionar OPAs de empresas extranjeras, que según la legislación entonces vigente no tenía. La llamada de E.On a que las consideraciones del Gobierno se limitaran a criterios “meramente empresariales” parecía más bien una declaración de que, en caso de que el Gobierno siguiera por consideraciones políticas, tendría al Ejecutivo alemán y a la Comisión Europea de su lado, defendiendo la unidad del mercado europeo.