La caída del precio de las eléctricas, tras el 'rally' de días precedentes, reactivó las adquisiciones de las constructoras en la recta final de la semana. ACS y Acciona siguen su camino, con proyectos independientes que pueden dar lugar a una nueva configuración del mapa eléctrico. Entre compras y encargos, Acciona ya suma el 15,01% de Endesa, en tanto ACS alcanzó el 10% de Iberdrola, el objetivo que se había propuesto en la noche del jueves.
La barrera del 10%, que obliga al comprador de una eléctrica a someter la operación al examen de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), ha provocado que en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores aparezca un 5,254% de Endesa como propiedad del grupo Santander.
Pero el banco ha dejado bien claro que se ha limitado a «comprar por encargo» en una operación de cobertura mediante derivados.
La empresa se cubre
Mientras Acciona obtiene el permiso del regulador, y con el 10% de Endesa ya en su poder, el banco ha comprado un 5% para la constructora, con la que ha pactado un determinado precio. De este modo, Acciona se cubre ante la evolución que puedan tener los títulos de la empresa Endesa en ese plazo.
Cuando disponga de la autorización, el Santander sacará al mercado ese paquete accionarial y le abonará a Acciona la diferencia para que pueda comprarlo. De este modo se cumplen los requisitos legales, y la constructora nunca infringe la ley, ya que no se trata de un 'aparcamiento' de acciones.
El paquete accionarial que el Santander ha comprado para Acciona tiene un valor de mercado de 1.866 millones de euros, con lo que el conjunto de la participación de la constructora asciende a 5.331 millones. En cuando al banco, en su cartera hay una cuota residual de 'endesas', que las aseguradoras y sociedades de valores de Santander y Banesto tienen dispuestas para atender la demanda de las 'cestas' de sus fondos.
Endesa, por debajo
Al mercado no le sorprendió la noticia, con lo que los títulos de Acciona apenas repuntaron un 0,1% en la Bolsa.
Los de Endesa, en cambio, fueron penalizados por segundo día consecutivo y, tras caer el 1,6%, cerraron a 33,55 euros, casi un euro y medio por debajo de lo que E.ON ofrecerá cuando presente el folleto de su OPA a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Las acciones de las compañías eléctricas protagonizaron su segunda jornada de resaca en la Bolsa, que contrapesa en cierta manera la enorme revalorización que experimentaron en las primeros tres días de la presente semana al calor de las operaciones empresariales que registraba el sector. El Ibex 35 llegó a superar durante las primeras horas los 13.000 puntos, un valor nunca alcanzado, pero se fue moderando hasta cerrar en 12.934,7, lo que supone un escaso repunte del 0,03%.
Iberdrola fue el 'farolillo rojo' por segunda jornada consecutiva, al perder un 3,3%.
Sus títulos quedaron en 35,3 euros, un día después de que ACS adquiriese un 3,69% adicional de su capital a un precio «ligeramente inferior» a los 37 euros a que compró un 6,31% el martes. Con todo, la eléctrica puede presumir de haberse revalorizado un 9,36% en la semana y un 52,68% en un año. Endesa le supera en los últimos cinco días (14,43%), pero no en el conjunto del ejercicio (50,85%).
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