Endesa, Iberdrola, Fenosa, Cantábrico y Viesgo se unen para reclamar un nuevo marco regulatorio que incentive las inversiones.
Las empresas eléctricas están a punto de superar sus diferencias para realizar una propuesta conjunta al Gobierno sobre el marco económico del negocio de distribución.
Endesa, Iberdrola, Unión Fenosa, Hidrocantábrico y Viesgo ultiman un acuerdo en la patronal Unesa que contiene una petición de aumento de seiscientos millones de euros de los ingresos anuales de esa actividad, que consiste en la propiedad y operación de las redes que llevan la electricidad desde las líneas de alta tensión hasta sus 25 millones de clientes.
Esa cantidad adicional, que Unesa pide para 2007, supondría un aumento del 15% en la retribución actual de las distribuidoras, que perciben unos 3.500 millones de euros con cargo a la tarifa de la luz.
Las empresas justifican su petición en la escasa rentabilidad que obtienen para sus inversiones en nuevas redes con el marco actual. El fuerte crecimiento de la demanda de electricidad en España (5% anual) y la masiva construcción de viviendas han exigido al sector un desembolso de 8.524 millones entre 2001 y 2004 en nuevas instalaciones y mejora de las actuales.
Ese proceso inversor, al no ir acompañado de un incremento sustancial de los ingresos (la legislación impide que crezcan más que la inflación), ha desplomado la rentabilidad del negocio, según Unesa. Por cada cien euros invertidos en redes, las eléctricas recuperan tres euros anuales, según datos de la patronal. Al comienzo de la década, la rentabilidad del negocio rondaba el 6%.
El aumento de los ingresos permitiría incentivar futuras inversiones, indican las eléctricas. Entre 2006 y 2008, el sector prevé dedicar 4.400 millones a la ampliación de ese servicio.
Fuentes cercanas al Gobierno reconocen la necesidad de mejorar los pagos a la distribución, que ahora sólo se llevan un 18% de los ingresos totales de la factura de la luz. Pero consideran que la petición del sector es excesiva. El Ministerio de Industria estaría dispuesto a mejorar entre trescientos y cuatrocientos millones de euros la retribución a las distribuidoras. El departamento de Joan Clos tiene que combinar la reclamación de las redes con otras peticiones de aumento de ingresos con cargo a la tarifa de la luz de 2007 por parte de las actividades de generación de las eléctricas.
El Gobierno, además, quiere que una parte más importante de los ingresos de las distribuidoras dependa de la calidad del servicio, que ahora sólo se estimula con 90 millones anuales.
Reparto por empresas
El acuerdo entre las eléctricas podría cerrarse en los próximos días. Sólo está pendiente de un entendimiento sobre el reparto entre las empresas de los ingresos. En principio, Endesa podría reducir ligeramente su cuota (ahora es del 40%) en beneficio de las empresas más pequeñas, Hidrocantábrico y Viesgo. Estas compañías, controladas por Energias de Portugal (EDP) y Enel, respectivamente, se llevan cada una el 3% de los ingresos.
El problema surge si Industria sólo acepta un aumento de la retribución de 400 millones. En ese caso, Fenosa e Iberdrola también podrían perder cuota.
Source: Expansión
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