UE: Bruselas insiste en que la CNE tiene “poderes demasiado discrecionales”

La Comisión Europea no le quita ojo a la actuación de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) en la oferta pública de adquisición (opa) de la alemana E.ON sobre Endesa, cuyo dictamen final podría conocerse hoy mismo.

Ayer, Bruselas insistió, por boca de su portavoz del Mercado Interior, Oliver Drewes, en que la CNE tiene “poderes demasiado discrecionales” para analizar operaciones de concentración, tras la ampliación de funciones aprobada en febrero pasado, nada más presentar E.ON su oferta.

Esto, dijo Drewes, no garantiza un proceso “justo y transparente” y vulnera la libre circulación de capitales y la libertad de establecimiento. El portavoz recordó que, por este motivo, la Comisión Europea ordenó la apertura de un expediente a España a principios de mayo.

Drewes recibió ayer por la tarde –poco después de que expirara el plazo– las explicaciones del Gobierno español respecto a las nuevas funciones del organismo que preside María Teresa Costa, informa Efe. Se trata de un documento de unas 40 páginas, que los servicios de la dirección general de Mercado Interior deberán analizar antes de poder dar una respuesta.

Ese análisis llevará su tiempo, porque la información que envíe España, como dijo ayer Drewes, “no serán dos frases”, por lo que no se espera una decisión al respecto “antes de septiembre”.
Los expertos de la Comisión deberán ver si las autoridades españolas responden a las preocupaciones expresadas por Bruselas cuando le enviaron la demanda.

Respecto al dictamen de la CNE, que podría conocerse mañana, el portavoz de la Comisión, Michael Mann, se limitó a señalar que Bruselas esperará “a ver qué es lo que los reguladores nacionales dicen” antes de dar su opinión. Ayer, el portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, dio por hecho que el Gobierno negocia con E.ON y pidió al Ejecutivo que no interfiera en las deliberaciones de la CNE.

En el ámbito empresarial, Rafael Villaseca, consejero delegado de Gas Natural –compañía que ha lanzado una oferta inferior a la de E.ON–, negó, durante la presentación de las cuentas de la compañía, que ésta mantenga negociaciones con E.ON o Endesa en busca de una salida pactada a las opas.

El directivo apostó por “esperar y ver la situación que se plantea” tras la resolución de la CNE. Al ser preguntado por la posibilidad de un veto, recordó que las nuevas funciones del regulador son un “mandato del Parlamento”.

Villaseca recordó que, hasta ahora, la única oferta que ha cumplido los trámites administrativos ha sido la de Gas Natural, que ya ha recibido el visto bueno de la CNE, el Gobierno y la Comisión del Mercado de Valores (CNMV), aunque está suspendida de forma cautelar por el Tribunal Supremo y un tribunal mercantil madrileño, a petición de Endesa.

El directivo dio a entender que la compañía presentará un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional contra la decisión del Supremo, aunque aclaró que todavía no lo ha hecho. El plazo para hacerlo expira el próximo lunes.

Villaseca criticó que Endesa “no tenga reparos” en pedir a la CNE que no ponga condiciones a la opa de E.ON y, sin embargo, “hiciera todo lo contrario” en la operación de la gasista. Y, respecto a las centrales nucleares de Endesa –uno de los activos cuya venta podría forzar el regulador–, aludió a la “enorme sensibilidad” que suscitan estas plantas e incurrió en un desliz lingüístico. “En todos los países europeos, la energía nuclear está en manos de sus respectivos gobiernos; me corrijo: está en manos de las empresas de sus respectivos países”, sentenció Villaseca.