La mayor petrolera de Rusia, Lukoil, tuvo que salir a calmar el alboroto que se armó por una información sobre reservas de 100 millones de barriles de petróleo en San Luis de Gaceno.
El anuncio mundial que hizo el miércoles pasado la mayor empresa petrolera rusa Lukoil sobre su primer descubrimiento en el Hemisferio Occidental, específicamente en Boyacá -en el que calculó reservas por 100 millones de barriles- en lugar de regocijar al Gobierno, paradójicamente se le estaba convirtiendo en un dolor de cabeza.
Tanto así, que un día después la misma petrolera tuvo que salir a calmar el aboroto, nuevamente en ruso e inglés, aclarando que el tamaño de reservas al que hizo referencia en el primer comunicado emitido desde Moscú se trataba de 'recursos prospectivos', los cuales deberán ser probados con perforación de futuros pozos exploratorios.
Y es que el Gobierno, tanto Ecopetrol como el mismo Ministerio de Minas, ya están tan prevenidos por los fallidos anuncios sobre descubrimientos, que fueron los primeros en cuestionar la ligereza con que se informó del hallazgo en el Bloque Medina.
El mismo ministro de Minas y Energía, Hernán Martínez, se mostró sorprendido en rueda de prensa por la forma "precipitada" como la petrolera rusa dio a conocer la información y no encontró otra explicación de que se hubiera tratado del "entusiasmo de los geólogos".
Y es que Martínez, un conocedor del sector energético, no quiere pasar por los tragos amargos de sus antecesores con los tristemente célebres pozos de Coporo y más recientemente de Gibraltar, que provocaron sendos debates en el Congreso en los que se llegó a acusar al gobierno de estar mintiéndole al país. Solamente dentro de seis meses, como mínimo, se podrá saber si Cóndor-1 'volará' tan alto como creen los geólogos o si, por el contrario, es otra gran frustración en los desesperados intentos por encontrar nuevos yacimientos de petróleo.
"La primera estimación indica un potencial de las posibles reservas del campo de 83 Mbbls al 100 por ciento, que deben ser validadas a través de trabajos adicionales," señaló Maurel & Prom en un comunicado.
Los socios de Maurel & Prom en esta exploración son Cepsa, que posee una participación del 33,33 por ciento, y Petrobras, que tiene una porción del 30 por ciento. Hocol posee alrededor del 37 por ciento.
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